Pintar gotele y salir airoso
Hasta hace unos años raro era encontrar una pared sin gotele, y es que esta técnica decorativa se puso de moda durante muchos años, ya que además de darle un volumen diferente a las paredes, conseguía disimular los defectos de la pared a la perfección.
Poco a poco se fue pasando la moda y empezaron a rascarse las paredes para dejar estancias con superficies totalmente lisas consiguiendo un efecto más limpio y más amplio.
No obstante seguimos encontrando algunos ejemplos de gotele en casas más antiguas, que ya lo tenían y que no lo han querido retirar, ya que rascar las paredes supone una pequeña obra de reforma, se levanta mucho polvo y ensucia toda la estancia.
Es posible que necesites o estés buscando ideas para pintar la casa por lo que te conviene seguir leyendo.
Aunque cada vez lo vemos menos, aun hay muchas viviendas que lo presentan. La técnica del gotele consiste en esparcir sobre la pared gotas de la pintura escogida que debe tener una consistencia espesa que nos de el acabado grumoso característico de este tipo de pintura.
Pintar gotele se puede hacer con pistolas de proyección de aire comprimido, rodillos especiales para pintar gotele o con tirolesas.
Ventajas de pintar gotele
Es fácil encontrar ventajas de pintar gotele, porque como ya hemos dicho, es un tipo de pintura que consigue disimular a la perfección cualquier tipo de desperfecto que presente la pared, y no solo nos referimos a algún golpe, sino también a los defectos de la pared más obvios como pequeños abombamientos. El gotele consigue disimularlos muy bien.
El más común se consigue con pintura al temple, pero también podemos encontrar algunas mezclas a base de pastas que densifican la pintura, a las que se les añade una pequeña proporción de pintura o agua para poder aplicarlo.
No obstante, la consistencia de la mezcla dependerá del tipo de relieve que queramos conseguir al pintar gotele.
Pintar una pared que ya tiene gotele en realidad es bastante sencillo, ya que solo necesitas un rodillo y la pintura en concreto, puedes aprovechar y aplicar los colores de pintura más actuales.
Si quieres disimular el efecto del gotele, porque no te gusta, pero no quieres meterte en el rascado de las paredes, lo más adecuado es pintar con una pintura blanca totalmente mate, ya que las pinturas con brillo consiguen resaltar la gota, destacando aun más el efecto del gotele.
Para pintar gotele debes preparar la mezcla para toda la estancia de una vez, para evitar diferencias en las tonalidades.
El gotele siempre se veía en tonos blancos, pero también podemos aplicarle color. Si nos hemos comprado una casa que tiene gotele y no podemos permitirnos el sobrecoste de retirarlo podemos aprovechar y pintar gotele de color para darle un toque más actual a la estancia. Esto sobre todo funciona si vamos a pintar gotele sobre un grano más pequeño.
Además es una forma de evitar tener que estar pendientes de pintar a la perfección, ya que el gotele disimula los fallos que podamos cometer al pintar.
Lo mas aconsejable es aplicar dos manos de pintura para conseguir un acabado más uniforme en toda la habitación.
Como retirar la pintura tras pintar gotele
Podemos retirar la pintura de dos formas, la más habitual es el rascado de las paredes, pero también podemos disimular el gotele aplicando una capa de masilla a toda la pared.
Pintar gotele es una técnica en desuso que cada vez vemos menos, pero retirarlo es bastante costoso, por lo que muchas personas optan por mantenerlo cuando compran viviendas de segunda mano que aun lo tienen.
Los pasos a seguir para retirar la pintura tras pintar gotele son los siguientes:
- Debemos proteger los suelos con cartones para intentar manchar lo menos posible y recoger así el residuo. También debemos cubrir las puertas y las ventanas.
- Si al pintar gotele han utilizado pintura al temple, debemos preparar una mezcla con ecoestabilizador y agua, hasta obtener una masa homogénea.
- Aplicamos la mezcla por toda la superficie con un rodillo.
- Pulverizamos toda la pared con agua para humedecer y dejamos actuar unos minutos.
- Con una rasqueta empezamos a rascar, retirando todas las crestas que han surgido al pintar gotele.
- Se vuelve a rociar con agua y procedemos a retirar completamente el gotele.
Es una técnica que parece sencilla, y en realidad no es complicada pero requiere algo de experiencia para poder hacerla en condiciones óptimas.
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